Lo que aquí cuento, son experiencias personales y vivencias ocurridas a lo largo de mi vida dentro de este maravilloso mundo que son las Artes Marciales, y los deportes de contacto; son experiencias propias, no de terceros… vivencias de uno, de nadie más, no son comentarios de oídas; son comentarios sobre una realidad trascendente; a veces triste, otras dolorosa, la mayoría inspiradora.
Tuve oportunidad, en 35 años, de conocer a todo tipo de maestros, instructores y personajes…
Muchos de ellos encumbrados en la cima de la fama efímera, que derrumbaron mitos, y leyendas…
Todos ellos, aparecen en el libro, en diferentes capítulos, ahora sin ir más lejos viene a mi memoria cierto recuerdo; en mi casa, almorzando…
- Jajjajaa, Mitose, no recibió ninguna transmisión del Kosho Shorei Ryu, fui yo, con él, los que en un fin de semana inventamos los kata, basándonos en las heian de karate – afirmaba el maestro de kempo, mientras tomaba un vaso de wiskhy…..
- Has destrozado, uno de mis mitos, me parecía tan hermosa la filosofía del clan Mitose… - afirmé asombrado.
- ¡Pues no existe! – ratificó serenamente dicho maestro.
Y qué decir de cierto Maestro Ninja, hoy muy famoso, que en sus orígenes era traficante de tabaco, y de otras sustancias psicotrópicas, que andaba por los montes a oscuras, no para probar su experiencia de ninja en pijama, sino todo lo contrario, a efectos de no ser descubierto por las fuerzas del orden público, más concretamente de la Guardia Civil.
Lo aquí suscrito, no son ataques sin fundamento, podrás ver y apreciar querido lector, que están documentados, e invito a que compruebes la realidad de lo que afirmo, por tus propios medios deductivos.
La picaresca de estos seres, es ingeniosa… crean asociaciones a fin de realizar, muchas veces fraude de Ley, sitúan en cargos directivos a familiares, y abren gimnasios, obviando, que el fin de una asociación no es la obtención de lucro; para eso están las sociedades mercantiles.
Es además competencia desleal, hacia aquellos DOJOS y Gimnasios, que pagan sus impuestos, declaran
Estas asociaciones, como ejemplo -entre otras muchas que saldrán en estas líneas, e invito a que demuestren mí equivocación, errar es de humanos -la Asociación Internacional Bushikan Karate Do; la presidenta es LILIANA FARÍAS BUSTAMANTE, el Secretario es su yerno, DIEGO OSCAR DELGADO CROCE, y la Vicepresidenta GRESSLY ARELLANO FARÍAS, su hija: llevan además un doble registro de libros de socios, ya que al ser asociación, debería haber una elección democrática a efecto de ocupar los cargos antes mencionados, pero esto no sucede….
Además, el NYS (identificación para extranjeros en el Reino de España) , ya que la Presidenta es de nacionalidad venezolana, está para una empleada de hogar, su permiso no es para la enseñanza de ningún tipo… y menos de artes marciales, que implícitamente llevan una responsabilidad como profesora sobre sus alumnos, sobre todo si hay menores de edad.
Su contrato, está realizado por la madre de ciertos alumnos, que la tiene contratada, a la vez que ella cada mes le entrega del dinero de la asociación lo que corresponde para el pago de la seguridad social.
Después de tener una inspección de trabajo en el Gimnasio Bushikan, manipuló presuntamente los libros, a efectos de no demostrar beneficio, y se dio de alta por horas como autónomo.
Tanto Gressly Arellano Farías, como Diego Oscar Delgado Croce, trabajan en dicho gimnasio dando clases, sin contar los instructores de aerobic, capoeira, etc… no están dados de alta en la seguridad social; en ningún régimen, ni siquiera en el de horas.
Si llega la inspección de trabajo alega la susodicha “maestra”; que como alumnos tienen la obligación de hacer unas prácticas… ¡ dando clase ¡, eso sí, clases que cobra ella, a través de la asociación, matrículas incluídas.
Así y todo, tal como iremos viendo, no queda ahí el fraude de ley. Se organizan CAMPEONATOS, en los que hay que abonar inscripciones por modalidad. Dichos eventos no son declarados a HACIENDA, y la mayoría de las veces, ni se cuenta con un seguro de responsabilidad civil.
CONTINUARÁ..
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